Vega está cansada del color gris que inunda su día a día. Inmersa en una relación que no funciona desde hace tiempo, en una ciudad que ha dejado de gustarle, siente que está desperdiciando su vida.
Por eso, decide romper con todo aquello que la ata y que no la ilusiona y se dispone a empezar de cero en un pueblo de costa como profesora de violín. Tendrá que ubicarse en este nuevo espacio, apartada de su zona de confort y lejos de Elsa, su mejor amiga que, contra todo pronóstico, decidirá acompañarla en esta nueva aventura que la llevará hasta una librería, la de los hermanos Morel, y a encontrarse con Mario, una combinación perfecta de libros y mar.
Después del éxito de ventas y críticas de El cuaderno de Paula, Sara Ballarín regresa al panorama de la narrativa con una novela ágil y divertida, diferente, que habla de amor, de dos personas con proyectos diversos que luchan por descubrir el mundo de la mano.
MI OPINIÓN:
Hace tiempo que tenía el libro en mi estantería pero no me animaba del todo a leerlo, tenía las expectativas muy altas por la cantidad de comentarios y halagos que habían hecho sobre esta novela unas amigas, hasta en otras reseñas que observé. ¿Cómo no leerlo pues?
Nos encontramos con Vega, una chica que cansada de la rutina decide dejarlo todo, y decide emprender camino en busca de su propia felicidad y libertad. Con una forma de hablar muy coloquial, directa y clara. No se anda por las ramas. Lo cual nos hace conocerla un poco mejor.
La historia ha tenido para mí sus más y sus menos. Al principio me costó bastante arrancar, buscaba algo que me enganchara o que me hiciera querer seguir y acababa desesperando. Hasta que conseguí pillarle el punto a la historia.
Aún así sentía que la historia no llegaba a ningún sitio, no es la novela del año (no para mí) ya que me ha dejado muy indiferente. No he conectado casi con los personajes, ni la historia y para mí que ha habido muchas cosas que se me han escapado.
Aunque por otro lado es una novela fresca, ligera y entretenida para el verano pero muy tranquila y lineal al mismo tiempo. No se si me explico.
En resumen, una historia ligerita para el verano sin muchas complicaciones y tranquilita. Ideal para leer en la playita o en cualquier momento libre para despejarnos un poco.
Nos encontramos con Vega, una chica que cansada de la rutina decide dejarlo todo, y decide emprender camino en busca de su propia felicidad y libertad. Con una forma de hablar muy coloquial, directa y clara. No se anda por las ramas. Lo cual nos hace conocerla un poco mejor.
La historia ha tenido para mí sus más y sus menos. Al principio me costó bastante arrancar, buscaba algo que me enganchara o que me hiciera querer seguir y acababa desesperando. Hasta que conseguí pillarle el punto a la historia.
Aún así sentía que la historia no llegaba a ningún sitio, no es la novela del año (no para mí) ya que me ha dejado muy indiferente. No he conectado casi con los personajes, ni la historia y para mí que ha habido muchas cosas que se me han escapado.
Aunque por otro lado es una novela fresca, ligera y entretenida para el verano pero muy tranquila y lineal al mismo tiempo. No se si me explico.
En resumen, una historia ligerita para el verano sin muchas complicaciones y tranquilita. Ideal para leer en la playita o en cualquier momento libre para despejarnos un poco.
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